La subrogación hipotecaria, es decir, hacer el cambio hipoteca a otro banco, requiere una serie de gastos económicos que deben ser considerados antes de iniciar la operación.
Gastos de la subrogación hipotecaria del banco
Algunos de los gastos de la subrogación de hipoteca son asumidos por el banco, tal y como constata la Ley Hipotecaria que entró en vigor en 2019:
- Notaría: en torno a los 30€, se refiere a las escrituras solicitadas por el cliente. Los aranceles de la notaría, además son de un 0,2% y un 0,5%, aplicados directamente sobre el importe del capital pendiente de la hipoteca.
- Gestoría: estos gastos de subrogación de hipoteca están regulados por ley, al igual que los de notaría. Oscilan entre los 100€ y 300€.
- Inscripción en el Registro de la Propiedad
- Impuestos sobre Actos Jurídicos Documentados (IAJD).
Gastos de subrogación hipoteca del cliente
Los gastos que debe afrontar el cliente o acreedor durante una subrogación de hipoteca son:
- Comisión de subrogación: Su coste depende del contrato de financiación pactado con el banco previo a la subrogación. No obstante, por ley, durante los 5 primeros años es del 0,50%. Para el resto de años siguientes, esta comisión se sitúa en:
o 0,25% para las hipotecas fijas.
o Para las hipotecas variables, también tiene un máximo del 0,25% pero solo durante los tres primeros años del crédito. A partir del cuarto, baja hasta el 0,15% y después se elimina la comisión.
- Tasación de la vivienda: su coste suele oscilar entre los 200€ y 400€, aunque depende de las diferentes tarifas ofrecidas por las compañías tasadoras.
Cabe recalcar que los gastos de subrogación de hipoteca son prácticamente iguales, sea cual sea el banco al que se cambie la hipoteca.
¿Cuándo interesa la subrogación de hipoteca?
Son muchas las razones para subrogar hipoteca, pero entre los principales factores a considerar son el tipo de interés y las comisiones que exigiría la nueva entidad bancaria. Normalmente, la subrogación hipotecaria es una buena opción para aquellos clientes que tengan un tipo de interés más caro que el de la media del mercado en ese momento (Euribor +1%). Por otra parte, la subrogación es una opción interesante para los acreedores que firmaron su hipoteca hace unos años, cuando las condiciones firmadas eran diferentes a las necesidades actuales.
Aunque suponga un gasto inicial, cambiar la hipoteca de banco acaba siendo una operación rentable en la gran mayoría de los casos. La operación ofrece ventajas como rebajar el interés o eliminar comisiones y otro tipo de cláusulas.